Hongos en los pies y zapatos

Hongos en pies o zapatos, ¿qué son y qué hacer si se contagia?

¿Sabía usted que puede contraer hongos en los pies o las uñas? Esto es una condición que se da con cierta frecuencia. Si se dan las condiciones correctas, sus pies, uñas o zapatos (o los de su familia) pueden llegar a contraer un hongo.

Las consecuencias son más o menos variadas dependiendo de la zona afectada. Pueden llevar al mal olor, ampollas, enrojecimiento y picazón en la zona, piel agrietada o descamación. También, si se contrae específicamente en las uñas, éstas pueden conllevar dolor en la zona, debilitamiento de la uña e incluso adquirir un color blanco o marrón junto con cierto mal olor en la parte infectada. De no tratarse, puede agravarse y comprometer más de una zona del pie.

A su vez, pueden los zapatos adquirir estos hongos para después transmitirlos a sus pies. Los hongos en zapatos atraen un mal olor permanente, además del peligro latente de transmitirlo a sus pies.

¿Cómo se contagian? ¿Hay métodos de prevención?

Para ambos casos, pies y zapatos, los medios de contagio son parecidos, pero con una especial riesgo en los pies. Un factor de riesgo constante es caminar sin zapatos por lugares públicos como vestuarios, piscinas o duchas públicas. Por ello, se debe procurar el uso de sandalias en caso de visitar o utilizar alguno de estos espacios y evitar que el pie tenga contacto directo con el suelo.

Un segundo factor de riesgo es la mala higiene de los pies y zapatos. En el caso de los pies, se debe optar por un buen lavado con agua y jabón, sin olvidar tallar entre los dedos. También es muy importante secar muy bien toda la zona después de lavarla para evitar humedad tanto en el pie como en el zapato. Y, de igual forma,

Nuestra anatomía, en este caso, puede jugar en nuestra contra. El tercer factor de riesgo es tener una sudoración intensa en el pie, lo que ocasiona una alta humedad en el zapato y, por consecuencia, un ambiente ideal para el desarrollo de hongos. Para esto, lo mejor es consultar con su médico para que le recete un producto que pueda mitigar estos efectos.

De igual manera, con el paso de los años pueden aumentar los problemas de circulación y se disminuye la velocidad de crecimiento de las uñas. Esto en sí mismo, llega a representar un cuarto factor de riesgo. Por ello, es aconsejable que los adultos mayores estén atentos a cualquier cambio en la sensación del pie, así como tener en cuenta todas las recomendaciones anteriores.

¿Qué hacer si ya hay contagio?

Para saber si tiene algún tipo de hongo en su pie, tenga en cuenta uno de estos signos de alarma como tener el pie hinchado, afiebrado, con pus o si nota algo fuera de lo común en cualquier parte del pie. También estar atento si sale algún cayo que no se pueda quitar. Y para saber si tiene un hongo en los zapatos, normalmente basta con estar atento al olor que desprenden e intentar no usarlos durante más de dos días seguidos.

Ahora bien, en caso de contraerlo o tener la sospecha lo primero y más importante es visitar a su médico y seguir sus recomendaciones lo mejor posible. Utilizar los medicamentos que recete y mantener una buena higiene en la zona afectada y en los zapatos.

Finalmente para los zapatos, es ideal darles una desinfección profunda para eliminar cualquier rastro del hongo y evitar una posible reinfección o algún mal olor. Bien puede llevarlos a una lavandería para que dejarlo en manos de los expertos. O bien, puede intentarlo usted mismo en casa, por ello le dejamos esta lista de remedios que puede probar.

×